Aprovechó su trabajo nocturno en un hospital londinense y la violó varias veces.
El onanista se defendió argumentando "que es una práctica habitual" en su país natal.
¡ERA VIRGEN!La soledad es una maldición compañera que lleva a algunas personas a extremos inimaginables como a darle besos al espejo, conversar con la operadora telefónica, o a chatear por internet con quien quiera escucharlos.
Un inmigrante polaco en Londres llegó a la capital inglesa con muchas aspiraciones. Aspiraba conseguir un buen trabajo para mandar plata a su familia, aspiraba conocer a una buena mujer, y en definitiva aspiraba a ser feliz.
El desgraciado luego de pensarlo durante varias semanas no pudo con la soledad y terminó violentando sexualmente a una doncella aspiradora marca Henry Hoover. El tipo aprovechó que no había más gente y durante un turno nocturno en el hospital infantil Great Ormond, donde se desempeñaba, la atacó varias veces.
La particularidad de la víctima es que el amigable modelo (que viene en colores rojo y azul) tiene dibujado unos ojos, así que mientras el polaco consumaba el ultraje la miraba pensando quizás en qué porquería.
Un guardia escuchó que el violador "estaba gritando más fuerte que el ruido de la aspiradora" y fue a cachar qué onda. Lo sorprendió a poto pelado, de rodillas en el comedor de empleados mientras era atendido por la sonriente aspiradora Henry Hoover.
Después de asimilar lo que veían sus ojos, el guardia le pidió que "se limpiara" e hiciera lo mismo con el aparato antes de mandarse a cambiar.
Los directivos del hospital le propinaron una monumental PLR. El pobre tipo se defendió. Dijo que "era una práctica habitual en Polonia". Plop.
fuente: La Cuarta.cl
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